sábado, 4 de agosto de 2007

Esmeralda

Esmeralda,
rodeada de oscuridad
oculta en el alma
sin existir en realidad.

Perdida,
en un viejo recuerdo
y reaparece,
como un delirio, incierto.

Lleno de misticismo
evaporando a la luna
enmarañando la mente,
con profundidad de mar.

Sombra de confusión
atadura a la realidad
frontera de la verdad,
de lo letal.

Psicodélica alucinación,
Incandescente,
en mi mente
al nacer el sol.

Esmeralda,
tatuada,
en la mirada.

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